Lanzamiento informe ‘Las caras de las disidencias, cinco años de incertidumbre y evolución’ *
Charla con Francisco Gutierrez Sanin sobre lo que la evidencia dice acerca de las disidencias, luego de cinco años de formación y evolución. Cuatro puntos clave son:
Desde 2016 las disidencias han estado creciendo en varias regiones del país y hoy en día hay aproximadamente 30 estructuras.
Estas estructuras no hacen parte de un proyecto nacional. Algunas alcanzan arreglos con los líderes más visibles, como Gentil Duarte o Iván Márquez, pero esto no quiere decir que haya una relación de subordinación, ni de coordinación permanente. Además, hay disidencias eminentemente locales, aún en formación, que no buscan el paraguas de las más grandes y apuestan por proyectos independientes que eventualmente las llevan a coordinar y forjar alianzas con estructuras criminales preexistentes.
La disidencias son proyectos que han venido surgiendo desde lo local hacia lo regional y no al revés. Un error recurrente es pensar que todos los grupos disidentes tienen una jerarquía vertical con una línea de mando definida. Esto desconoce el surgimiento y evolución de estos grupos, que ha sido en muchos casos de abajo hacia arriba (“bottom-up”), en vez de arriba hacia abajo (top-down); a diferencia de las FARC-EP, cuyo crecimiento en gran medida se dio a partir del desdoblamiento de estructuras.
Las disidencias surgen por varias motivaciones que pueden cambiar con el tiempo y que no son excluyentes. Algunos dicen que las de los llanos orientales, vinculadas con Duarte, tienen una agenda política; otros, que la “disidencia política” está liderada por Márquez. Para el Gobierno de Iván Duque, todos son narcos sin rumbo. Esto niega la posibilidad de que un grupo esté motivado al mismo tiempo por plata y política.
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